Durante la Emergencia Sanitaria por el COVID-19, el Gobierno Nacional, a través del Plan Toda Una Vida, ha brindado protección social y respuestas inmediatas a la población más vulnerable.

269.188 personas con discapacidad y sus familias han recibido atención mediante llamadas telefónicas por parte de la Misión Las Manuelas. A través de este contacto se ha brindado información sobre cómo prevenir el contagio y se ha dado apoyo integral a través de la articulación con distintas instituciones del Estado. Esto ha permitido resolver sus requerimientos durante el periodo de aislamiento.

“Desde el Plan Toda Una Vida no hemos descansado ni un solo día durante la emergencia sanitaria. Nuestras queridas Manuelas han brindado acompañamiento telefónico a miles de personas con discapacidad. Con estas llamadas, también coordinamos visitas y atención personalizada. La Misión no se detiene y continuaremos trabajando por el cumplimiento de los derechos de los ecuatorianos”, sostuvo Rocío de Moreno, presidenta Ad Honorem del Plan Toda Una Vida.

Como parte de las visitas domiciliarias, los Médicos del Barrio del Ministerio de Salud proporcionaron atención médica y medicamentos. Asimismo, las brigadas de la Misión Las Manuelas se sumaron a la campaña Dar Una Mano sin Dar la Mano, para entregar kits alimenticios a personas con discapacidad.

Las brigadas de la Misión Las Manuelas llegaron al hogar de los padres de Lissette Cepeda, una menor con síndrome de Down de 15 días de nacida, quienes recibieron alimentos y pañales para la niña, que presentaba problemas de salud. Además, se coordinó el proceso de cedulación de Lissette y la solicitud de calificación de discapacidad.

“Me sorprendió la inmediatez. A los dos días de estar mi hija internada en el hospital, recibí la llamada de Las Manuelas quienes me visitaron en mi casa para brindarnos todo el apoyo que necesitábamos. Estoy muy agradecido por lo que hemos recibido, sobre todo, por la fuerza y esperanza que me han transmitido, porque ahora sé que no estoy solo en la recuperación de mi pequeña”, indicó Eduardo Cepeda, padre de Lissette.

Fausto López, quien presenta un diagnóstico de cáncer de columna, también fue atendido de forma inmediata, luego de que se conociera su caso a través de un medio de comunicación. Las Manuelas coordinaron con las instituciones del Gobierno Nacional para brindarle una atención integral en su domicilio. El Médico del Barrio le entregó medicamentos y la brigada del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), le entregó un kit de alimentos. Además, se levantó el registro social y se coordinó atención para sus dos hijos de 12 y 8 años, por parte del Ministerio de Educación.

Al respecto, el Gobierno ecuatoriano expuso recientemente, de manera virtual, su política de inclusión y atención integral a las personas con discapacidad en el IV Congreso Intergubernamental (CIG) Extraordinario del Programa Iberoamericano de Discapacidad (PID). En este espacio se hizo un llamado a los gobiernos del mundo a defender los derechos de este grupo vulnerable e impulsar los principios de no discriminación, igualdad de oportunidades y accesibilidad.

Del mismo modo, la Secretaría del Plan Toda Una Vida emitió recomendaciones al COE Nacional e instituciones competentes para la atención a personas con discapacidad en todos los ámbitos, de una manera transversal, durante la emergencia sanitaria.

Estas acciones se complementaron con capacitaciones virtuales dirigidas a los funcionarios del Hospital Carlos Andrade Marín, en Quito. Este espacio les permitió capacitarse sobre los derechos de personas con discapacidad y el uso de un lenguaje inclusivo.